sábado, 31 de agosto de 2013

Trasfondo: Carcharodons Astra (Parte 2)

Buenos días!

Continúo con el trasfondo de mis tiburones a la espera de que pueda acabar la escuadra en la que estoy trabajando para poder enseñárosla. Espero que os siga pareciendo interesante:






LA ALETA DEL ESCUALO

La majestuosa fortaleza monasterio de los Carcharodons, situada en una de las fosas abisales de Aquis, elaborada con enormes paredes de rococemento y con grandes paneles de cristal de hasta diez metros de grosor que permiten contemplar el océano a su alrededor. Acceder a la base de operaciones de los Carcharodons es imposible para cualquiera ajeno al capítulo pues solo gracias a enormes sumergibles del tamaño de una Thunderhawk hay contacto entre la Aleta del Escualo y el exterior.

Además de visión del océano que circunda a la fortaleza, en su interior hay múltiples acuarios santuario, en muchos casos situados en el centro de salas gigantescas, a modo de tanque decorativo. El mayor de estos acuarios es el denominado estanque de cría, construido en medio del apotecarion, donde se encuentran sumergidos cientos de sarcófagos a modo de incubadora de los nuevos reclutas de los Carcharodon. Estos sarcófagos flotando en calma unidos tan solo por unos pocos cables de alimentación y de soporte vital al suelo del acuario realmente parece un centro de desove que inspira una mezcla de respeto y repulsa al pensar que dentro de cada sarcófago está encerrado lo que en día fue un humano corriente que emergerá de las aguas siendo un Marine Espacial.

La gran mayoría de los acuarios están interconectados por lo que no es raro ver a diversas criaturas marinas nadando en calma en el estanque de cría o en otras de las estancias con visión a la red acuática que recorre toda la fortaleza monasterio. En cada una de las dependencias de los altos mandos del Capítulo hay un acuario con un Tiburón Blanco en su interior, lo que representa el culmen dentro de los Carcharodons, pues el animal pasa a estar a cargo de su dueño, que se encargará de su alimentación llegando a establecer una extraña sintonía entre ambos. No deja de ser inquietante el hecho de que estos marines puedan dormir con la única visión de un gran tiburón ante ellos.

Si no contamos los distintos acuarios que surcan la Aleta del Escualo la fortaleza monasterio de los Carcharodons es muy similar a las de otros capítulos marines, contando con todo lo que necesitan para ser autosuficientes, incluyendo el armorium o la sala de los héroes, donde descansan los (pocos) ancestrales Dreadnought del capítulo, entre los que destaca Sael Colmillo de Sangre, Primer Gran Megalodón de los Carcharodons; el más antiguo de los Dreadnought y el más venerado, que hace cerca de un milenio no entra en combate, pero a quien los Megalodones del Capítulo recurren en tiempos de gran necesidad en busca de su sabio consejo.

La última gran sala que destaca es el Salón de la Sangre, un espacio gigantesco desde el que se ven múltiples acuarios santuario y en el que cada espacio de pared libre está decorado con un estandarte sagrado que conmemora alguna de las grandes victorias de los Carcharodons. En este salón se realizan los principales actos sagrados, desde las ceremonias de iniciación a los banquetes previos a la partida a una larga campaña, momento en el que todos los hermanos se despiden, pues muchos no volverán a ver el océano de Aquis.




TÁCTICAS DE COMBATE

Los Carcharodons son famosos por sus grandes desembarcos planetarios en cápsulas de desembarco, pues en la guerra cercana es donde más cómodos se encuentran. Su especialidad es caer sobre el enemigo como el tiburón que huele la sangre, una vez localizada la presa los bólteres comienzan a escupir proyectiles aniquilando a los más débiles y provocando la reacción del enemigo; en el momento en que este se decide a atacar los bolteres son silenciados y comienza el rugido de espadas sierra y el festival de sangre. En muchas ocasiones los Carcharodons emplean como método de combate sus poderosas mandíbulas, sobretodo los rémoras más jóvenes, de modo que cuando el polvo del combate desaparece normalmente solo quedan restos mutilados de aquellos ilusos que provocaron la ira de los Tiburones del Emperador.

Las escuadras de Tiburones Tigre son las que suelen llevar el peso del combate empleando la táctica de dejar malherido al enemigo para asestar un golpe final. Coordinados de modo perfecto, estos hermanos de batalla se consideran unos a otros hermanos de sangre y dentro de las escuadras no necesitan órdenes, pues el arte de la caza y la muerte es ya una rutina para ellos y la mayor preocupación que las escuadras de Tiburones Tigre tienen entre sus manos es poder controlar al rémora al que tienen que "adoctrinar". Por suerte tras hostigar a la víctima la sangre y las dentelladas no tardan en hacer aparición, en ese momento, maestros y aprendices se dejan llevar por el frenesí del combate y por el olor a sangre fresca.

Las poco comunes escuadras de Rémoras solo son empleadas en aquellas campañas o batallas que los Señores Tiburón consideran asequibles para los más jóvenes, tras las cuales muchos pueden ser ascendidos a Tiburones Tigre despues de probar la sangre fresca. Estas escuadras siempre son guiadas por un Tiburón Blanco, pero al contrario que los rémoras integrados en las escuadras de Tiburones Tigre estos a penas pueden ser contenidos por su líder, en lugar de eso el Tiburón Blanco dirige a la escuadra hacia el enemigo más cercano para que los rémoras puedan descargar toda su rabia antes de caer muertos bajo los disparos.

Para desplegar su arte del combate los Carcharodons utilizan armas de corto alcance como los lanzallamas o rifles de fusión. Las armas pesadas solo están al alcance de aquellos hermanos de batalla que han dominado su sed de sangre, los Tiburones Toro, que ejercen las funciones de devastadores de otros capítulos codex. Por el contrario los Megalodon suelen ir acompañados de su escolta de Tiburones Blancos en armaduras de exterminador.

Los encargados de interrumpir las líneas de sumnistro enemigas y de exterminar a sus líderes son los maestros de la caza, los Tiburones Duende. Surgidos de la misma oscuridad que envuelve a las profundidades abisales emergen entre las sombras para liberar su sed de sangre y en un silencio sepulcral desaparecer poco después. Son raras las fuerzas de los Carcharodons que no incluyen al menos una unidad de estos sádicos hermanos de batalla.

A pesar de la gran efectividad que demuestra su estilo de combate este despierta muchos recelos entre otras fuerzas imperiales, incluso entre otros capítulos de marines, esto unido al rechazo que suelen demostrar los Carcharodons por aceptar aliados en sus campañas hacen que sea muy raro verles colaborando con otros contingentes. La única salvedad fue la Guerra de Badab, aunque incluso en un conflicto de estas magnitudes la comunicación entre los escualos y sus "aliados" era prácticamente nula.

Además de las cápsulas de desembarco los Carcharodons emplean rhinos y los Land Raider del Adeptus Astartes de que dispone el capítulo; a pesar de que su número no es muy elevado todos los miembros del capítulo sienten una gran devoción por ellos, ya que son capaces de llevar cualquier escuadra de Tiburones hasta el corazón de las líneas enemigas a salvo en una fortaleza de adamantio. Estos Land Raiders suelen estar adornados con enormes colmillos de tiburón, en especial sus puertas que simulan enormes mandíbulas que se abren solo para dejar paso a la auténtica destrucción que portan los Carcharodons.

Debido a las condiciones características de Aquis los Carcharodons carecen de tropas retropropulsadas o motorizadas. Los Dreadnought también son muy escasos en el capítulo, pues la maldición que les persigue apenas suele dejar hermanos de batalla capaces de ser enterrados en los sarcófagos sagrados, pero aquellos pocos que son aptos reciben un lugar de descanso eterno desde el que apoyar a sus hermanos de batalla en tiempos de necesidad desde sus sarcófagos inundados de agua de su planeta natal.


Espero sugerencias para mejorarlo, que esto aún es WIP.

Un saludo.
Mingu.

1 comentario:

  1. Como codcex para usar yo te veo templarios negros rabionicos o... puede que lobos espaciales y tal, ambos te adaptan al estilo qu epropones

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